Esperar que cambies, que vengas, que no te vayas, que lleves, que me des, que no me quites. Esperar que reacciones, que te des cuenta, que abras los ojos. Esperar que me hagas bien; a veces no, siempre. Esperar que te pongas en mi lugar cuando no te lo pido, cuando te digo que no importa, cuando creo que me entiendes pero al final no. Esperar que me des todo lo que merezco, antes de que me duela la tardanza. Esperar incondicionalidad recíproca y seguir esperando. Esperar que sientas lo mismo que siento yo cuando ya no siento nada porque me duele todo. Esperar que dejes tu disfraz de complicación hecho un trapo en el piso y seas más fácil (me seas más fácil). Buscarle mil justificaciones a tu desafecto cuando en el fondo sé que sólo son excusas. Esperar a alguien que nunca eres tú.
A veces espero cosas de mí mismo y me decepciono, no sé qué tanto sigo esperando de ti.

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